En un momento excepcional de su carrera, Helena demuestra que el trabajo duro da frutos, pero lo hace con la humildad que la caracteriza. “No siempre es así, por lo tanto, nos lo tomamos con cautela y humildad, disfrutando cada momento”, comentó tras su destacada actuación, dejando claro que su enfoque va más allá de los resultados.
El papel del equipo Art GIM Menorca ha sido crucial en este éxito. Aunque muchas veces trabajan desde la sombra, su apoyo constante y guía se han convertido en una pieza fundamental para el avance de Helena en el competitivo mundo del kárate.
Igualmente, la menorquina Irene Rotger Alzina se subió al podio en la modalidad de kata. Tras ir pasando rondas, solo en la final perdió la posibilidad de conseguir el oro y subirse a lo más alto del cajón. Con todo, firmó un espectacular campeonato.