(Fotos) Llega a Maó la exposición de Carme Vivó y Pepe Torrent
La sala de Ca n'Oliver en Maó acoge desde este viernes y hasta el mes de junio la exposición "Vivó-Torrent. Dues generacions, dues visions". Se trata de una muestra compuesta por 93 obras de Carmen Vivó y su hijo Pepe Torrent que ha organizado el Consell Insular y que se inauguró con motivo de Sant Antoni.
Entre el 25 de enero y el 22 de marzo, la exposición ha podido visitarse en la sala municipal de exposiciones El Roser, atrayendo a un total de 3.190 visitantes, una cifra que supera los registros de anteriores muestras en este mismo período. Cabe destacar el interés despertado entre los centros educativos, que han llevado a casi trescientos alumnos a las visitas guiadas dirigidas por la pintora Carmen Vivó.
Ella y Pepe Torrent son homenajeados este año por encontrarse entre los creadores más singulares de Menorca, tanto por su vínculo familiar (Pepe, fallecido en 2017, era hijo de Carmen) como por su aproximación a la pintura. Si bien pertenecen a dos generaciones distintas, su grado de compenetración dio lugar a la producción de obras colaborativas que en la exposición se han reunido bajo el título 'A 4MANS'. Es interesante subrayar, sin embargo, que sus estilos están claramente diferenciados y parten de dos visiones distintas en cuanto al lenguaje pictórico:
Carmen Vivó Saura (Ciutadella de Menorca, 1947) parte de una concepción de la pintura muy ligada al costumbrismo, un estilo de larga tradición en Menorca y del cual ella es la máxima representante en la actualidad. Adscrita a la llamada pintura naïf, cada una de sus obras es un friso de carácter festivo que celebra la vida en comunidad, siendo las fiestas de Sant Joan su máxima expresión. Sin embargo, su obra ha evolucionado con los años. En una primera etapa, su estilo naïf era más primitivo e ingenuo, con predominio de la indumentaria tradicional y escenas campestres. Con el tiempo, evolucionó hacia un estilo en el que el uso del color es más contenido, el dibujo predomina y las escenas populares representadas han ganado en diversidad. Hoy en día, su pintura se acerca más a la crónica social, donde no falta el humor ni una visión lúdica y placentera de la vida.
Pepe Torrent Vivó (Ciutadella, 1975 – Pisco, Perú, 2017) también centró su obra en la figura humana, pero con una pincelada larga, una luz espectral y paisajes irreales que acercan su pintura al territorio del simbolismo. Heredero, en cuanto al uso del color, de José Roberto Torrent, su abuelo, quien exploró las cualidades expresivas del color con una paleta aparentemente disonante. En sus figuras humanas sin rostro, el autor busca expresar la diversidad de experiencias y relatos vitales de los seres humanos. En sus dibujos con tinta, el registro es diferente, con una visión irónica y alegre de la vida, pero también paródica.
Ambas visiones nacen de un sentimiento de pertenencia y celebración de la vida en comunidad y de la condición humana.
La exposición está formada por un total de 93 obras, incluyendo óleos, acrílicos y dibujos. Hay 30 obras de Carmen Vivó, 54 de Pepe Torrent y nueve de de la sección 'A 4MANS'. Se complementa con caretas de Sant Joan y diversa documentación sobre ambos artistas.