En la actualidad 10 menores residen en la Casa de la Infancia y 5 menores en el segundo centro de protección habilitado en 2024, con edades comprendidas entre los 5 y los 17 años. “Es una cifra que, aunque ha sido estable en los últimos meses, sigue reflejando una realidad preocupante que debemos abordar con responsabilidad y firmeza. Es cierto que las actuaciones que hemos puesto en marcha durante el 2024 han tenido un resultado beneficioso, especialmente para los menores y desde el punto de vista profesional, pero debemos ser conscientes de que todavía queda mucho por hacer”, ha explicado la consellera de Bienestar Social, Carmen Reynés, este martes, 15 de abril.
La consellera ha realizado un balance de la situación de los menores en la isla, especialmente de los menores tutelados, junto al director insular de Atención Social, Daniel García del Mar, y el jefe del servicio de menores del Consell Insular, Jesús Barrasa.
Entre las acciones puestas en marcha en este ámbito, se encuentra reforzar el sistema de protección con la separación de los menores por perfiles y por edades mediante la puesta en funcionamiento de un nuevo piso, dotado de más personal, lo que ha permitido ofrecerles una atención más individualizada y acorde con sus intereses. También la ampliación de plazas residenciales y el incremento de profesionales para garantizar el cuidado y la atención de los menores. “Una medida que nos ha permitido proporcionar una mayor estabilidad a los trabajadores, logrando la fidelización del personal, un objetivo esencial dadas las dificultades en la isla para encontrar **profesionales”, ha expuesto Reynés.
“Y seguimos trabajando en el proyecto y pliegos para la licitación de las obras de la casa cedida por el Ayuntamiento de Mahón. Unas obras que llevarán más tiempo por requerir adaptaciones de accesibilidad y adecuación a la normativa, pero que creemos necesarias para disponer de un centro adecuado que permitirá ampliar el número de plazas”, ha añadido Reynés.
El departamento de Bienestar Social también ha iniciado nuevas campañas de sensibilización y apoyo a las familias acogedoras. “Desde el primer momento ha sido uno de nuestros principales objetivos: fomentar el sistema de acogida familiar y captar nuevas familias acogedoras. El recurso residencial debe ser la última opción, queremos que un menor crezca y se forme en el seno de una familia, lo cual es esencial para su desarrollo. Estamos muy contentos con la respuesta que ha tenido la sociedad menorquina”, ha dicho la consellera.
De hecho, se ha producido un incremento de familias acogedoras, pasando de 23 en 2023 a 33 en 2024.
En paralelo, se ha dado un impulso a las políticas de prevención con la creación de un nuevo equipo de intervención especializado para prestar apoyo, asesoramiento y seguimiento a las familias con menores en situación de riesgo. “El objetivo es evitar la agravación de la situación y que esta derive en una declaración de desamparo, con el consiguiente ingreso en el centro de protección, su desarraigo y la asunción de la tutela por parte del Consell Insular de Menorca”, ha señalado el jefe del servicio de infancia y familia.
El nuevo equipo ha trabajado con 24 familias y 40 menores o adolescentes. El 80 % de los casos eran situaciones de riesgo, el 7,5 % de desamparo, y el 12,5 % en medidas educativas. El 17,5 % de los expedientes ya se han resuelto con éxito.
“Aunque estamos contentos con las medidas implementadas, todavía queda mucho por hacer. El contexto es preocupante y debemos ser conscientes de que son datos oscilantes que pueden cambiar”, ha advertido Barrasa.
Durante 2023 y 2024, los casos notificados para valoración fueron 208 y 206. En 2025, ya se han notificado más de 70, frente a unos 50 en las mismas fechas del año anterior (un 40% más).
También ha aumentado la atención en declaraciones en situación de riesgo (de 24 a 39) y las medidas cautelares (de 15 a 21). Los expedientes de desamparo se mantienen en 17, lo que sugiere que la intervención preventiva está funcionando.
El director insular de Atención Social ha hecho un diagnóstico social: “Menorca, como el resto de territorios, no está aislada de los cambios sociales que afectan a la infancia: fragilidad económica, problemas de salud mental, rupturas familiares, uso precoz de la tecnología, acceso al consumo de sustancias, y patologías duales. La pérdida de autoridad de los padres y la permisividad agravan las vulnerabilidades. La protección de la infancia es un reto colectivo que nos interpela a todos”, ha afirmado.
Nueva ubicación del SIF
El Consell trabaja en el traslado del SIF desde el polígono de Maó a su ubicación anterior en la calle Vasallo, para facilitar el acceso a los usuarios. La licitación y adjudicación del proyecto ya están concluidas y las obras, financiadas con fondos Next Generation, comenzarán tras obtener el permiso.
Centro de menores con problemas de conducta
El Consell trabaja para que menores con problemas de conducta puedan ser atendidos en Menorca, sin necesidad de ser derivados a plazas contratadas en Mallorca.
Nuevas actividades
Se están desarrollando actividades adaptadas a los intereses de los menores del centro, como un proyecto vinculado al boxeo, para motivar y conectar con sus necesidades actuales.
Plan de intervención socioeducativo
También se está elaborando un Plan de intervención socioeducativo, que se aprobará este año con la coordinación de todos los agentes implicados, para dar respuesta a las nuevas necesidades. En paralelo, se diseñan programas de prevención y promoción para abordar la desmotivación, el absentismo crónico y los problemas conductuales.
“Es una realidad que como sociedad debemos afrontar de forma conjunta para mejorar el futuro de nuestros jóvenes”, ha concluido Reynés.