Lo cierto es que dar a la salud bucodental los cuidados que requiere es fundamental a lo largo de toda la vida, pero a partir de los cincuenta años adquiere si cabe una mayor relevancia. Pero, ¿por qué? Para averiguarlo, nos hemos puesto en contacto con la Clínica Albertí Fajardo, un centro odontológico de referencia en Mallorca. Esta clínica que destaca por su experiencia, tecnología avanzada y atención personalizada afirma que los siguientes motivos son clave.
Prevención de enfermedades bucodentales que pueden llegar a ser bastante graves
Las piezas dentales son estructuras mineralizadas que, con el paso de los años, sufren un inevitable desgaste. En ocasiones, se evidencia en una simple pérdida de funcionalidad, pero a veces termina manifestándose en forma de enfermedades que conviene detectar prematuramente para evitar problemas de salud de cierta gravedad.
Independientemente de si el motivo del problema de salud es el desgaste propio del transcurso de los años, la deficiente higiene bucodental o cualquier otro factor, es de vital importancia diagnosticar la enfermedad en cuestión para ponerle remedio. En caso contrario, podría avanzar a un ritmo vertiginoso y generar consecuencias irreversibles.
La periodontitis es un claro ejemplo, así como las caries que tantos menorquines sufren incluso sin saberlo. Es por esta razón que conviene acudir a un centro odontológico con cierta regularidad, ya que una revisión a tiempo puede prevenir o corregir este tipo de problemas.
Aplicación de los tratamientos adecuados
¿Sabías que la enfermedad periodontal puede ocasionar la pérdida de piezas dentales? Efectivamente, por lo que en caso de producirse este efecto, convendría recurrir a un tratamiento que, año tras año, se aplica a multitud de ciudadanos de Menorca, sobre todo aquellos que superan los cincuenta años de edad. Nos referimos a la implantología.
Si no se deposita la confianza en expertos en la materia que introduzcan en el hueco de la cavidad bucal un implante que imite la apariencia y el funcionamiento de la pieza dental original, la calidad de vida de la persona afectada disminuye de manera considerable. Todo lo contrario sucede tras completarse un tratamiento como el de la implantología en Mallorca, ya que el bienestar del paciente aumenta muchísimo a nivel físico y psicológico, recuperando instantáneamente su autoestima.
Continuando con lo referente a los tratamientos, hay que decir que a pesar de que dos pacientes sufran la misma enfermedad o problema bucodental, las soluciones idóneas no tienen por qué ser idénticas. Cuidar la salud de esta parte tan importante del organismo pasa por depositar la confianza en especialistas con una dilatada trayectoria a sus espaldas que ofrezcan un trato personalizado y den en el clavo a la hora de determinar qué tratamiento es el adecuado para la dolencia en cuestión.
Detección de otros problemas de salud
Hasta ahora hemos hablado solamente de problemas relacionados con la salud bucodental. Pero, ¿sabías que hay algunos cuyo origen está en otras partes del organismo? En efecto, siendo la diabetes el mejor ejemplo posible.
Cuidar la salud bucodental deriva en que algunos pacientes acaben descubriendo que padecen otros problemas de salud que, a priori, poco o nada tienen que ver con las piezas dentales, las encías o la lengua.
A la enfermedad que acabamos de mencionar hay que sumar tantas otras que, en ocasiones, los odontólogos creen que sus pacientes sufren: afecciones respiratorias, problemas cardiovasculares, etcétera. Tras derivarles al especialista adecuado, terminan diagnosticándoles la patología y, por ende, pueden recibir el tratamiento oportuno.
Mantenimiento del bienestar general
Aunque algunas personas no son conscientes de ello, hay que decir que existe una relación directa entre la salud bucodental y el bienestar general. Por ejemplo, las soluciones de implantología que hemos traído a colación en anteriores líneas consiguen mantener la calidad de vida durante la etapa de la media o avanzada edad.
La ausencia de piezas dentales es tan solo uno de los factores que lastran el bienestar general. Del listado también forman parte problemas como la xerostomía, también conocido como síndrome de la boca seca y que afecta con más frecuencia a las personas de edad superior a los cincuenta años.
Tras solucionar este tipo de afecciones entre las que se encuentra el bruxismo que impide descansar óptimamente por rechinar los dientes mientras se duerme, el bienestar general mejora de manera considerable, con todo lo positivo que ello conlleva.
Como acabamos de ver, es importantísimo cuidar la salud bucodental a partir del medio siglo de edad. Para tal fin, no basta con realizar una buena higiene tras cada comida, aunque es de inestimable ayuda. Adicionalmente, conviene acudir a revisión una vez al año para prevenir problemas de gravedad, aprovechando la cita en la clínica dental de tu elección para llevar a cabo una limpieza profesional.