Otra temporada ha arrancado y la sensación es la misma. Por un lado, la minoría, que cree que Menorca está desbordada y que no tendría que llegar ni la mitad de la mitad de la gente que nos visita. Por otro, la inmensa mayoría, los que viven y los que vivimos del turismo y que vemos en estos meses la oportunidad de trabajar lo suficiente para cubrir el resto del año. ¿La diferencia? Los segundos vivimos del turismo y los primeros viven de los que viven del turismo. Así que sea como sea, el turismo se mantiene como el principal motor económico de la Isla.
A la espera de que la realidad económica de Menorca cambie o la hagan cambiar y el motor sea otro, tener bien presente al turista y al turismo resulta prioritario. Indicaba hace unos días la encuesta Egatur que elabora el Instituto Nacional de Estadística un descenso en el gasto de los turistas en actividades de ocio, cultura y deporte, entre otros descensos. El Diario Menorca se hacía eco de este comportamiento y lo contraponía con el aumento de un 9% en el gasto en el alojamiento. Estos y otros datos permiten hacer una lectura fiable y sencilla del gasto turístico en Menorca. Crece el todo incluido y baja todo lo que no está incluido.
En un momento crucial del año para muchas empresas de Menorca, los datos muestran que el modelo turístico que menos tendría que interesar por la ratio consumo de recursos/impacto positivo para la Isla es el que más ha crecido bajando, por ende, los beneficios para la Isla. Cabe recordar, como viene denunciando VITURME, que las plazas hoteleras son las únicas que han crecido en los últimos años por el contrario de otras opciones, como las viviendas turísticas con licencia, que siguen paralizadas desde 2022.
¿Qué modelo interesa más? El que llega de la mano de un touroperador a un establecimiento que cubre todas las necesidades u otro que ofrece simplemente el alojamiento para que el propio turista salga a comprar, a comer, a divertirse… Y que ese gasto se convierta en inversión en empresas de Menorca.
Se puede vivir del turismo sin llegar a vivir para el turismo, porque dentro del todo incluido no está todo incluido.
No está todo incluido