El sector que presenta el balance más positivo es el de alquiler de vehículos, donde el 43,48% de las empresas afirma haber mejorado sus resultados respecto al año anterior. Solo un 17,39% declara un empeoramiento. Este sector consolida así una evolución positiva ya anticipada en el mes de mayo.
El comercio no repunta sus resultados teniendo en cuenta que un 34,55% señala haber empeorado su actividad en relación a 2024. En cambio, el 31,82% de las empresas encuestadas si mejoraron su actividad en junio. El 33,64% considera que su volumen de negocio ha sido similar al del año pasado. No obstante, desde el sector se percibe un visitante más contenido en el gasto y con una menor predisposición al consumo, en línea con lo reflejado en las cifras de gasto turístico del mes de mayo, que destaca por la reducción de casi el 25% de gasto en compras.
En el caso de cafeterías, bares y restaurantes, el 44,64% de las empresas declara haber facturado menos que en junio del año anterior. Aunque un 25% ha experimentado mejoras, los resultados de facturación menor que en 2024 en relación a la repercusión en precios del incremento de costes confirman que ha habido una reducción del ticket medio de los visitantes y una afluencia menor de clientes.
Estas actividades, muy ligadas al consumo espontáneo y al ocio local, también se ven impactadas por la creciente concentración del gasto en origen. El incremento del uso de paquetes turísticos, con transporte, alojamiento y manutención incluidas, deja menos margen de decisión al visitante una vez llega a la isla, y esto se refleja directamente en la contratación de estos servicios turísticos en destino.
Un 23,53% de las empresas de viviendas turísticas vacacionales ha mejorado sus resultados respecto a junio de 2024, mientras que el 29,41% indica una caída. Casi la mitad (47,06%) considera que el mes ha sido similar. Esta tendencia confirma la consolidación en este modelo de alojamiento, aún cuando las empresas manifiestan una correcta ocupación también indican que es debida a una política de flexibilidad de precios.
Seriamente preocupados se muestran los empresarios de restauración y alojamiento por el devenir del convenio colectivo de hostelería que prevé un incremento salarial del 13’5% en tres años que irremediablemente supondrá su incorporación a la hora de configurar precios y tarifas, no sólo para lo que queda de temporada sino para los próximos años.
La conclusión genérica de los resultados invita a la cautela. Aunque algunos sectores muestran una mejora respecto a mayo, los datos de junio confirman que la temporada turística sigue marcada por la incertidumbre y por una evolución muy dispar entre sectores.
PIME Menorca viene alertando del incremento paulatino del gasto turístico en paquete vacacional en detrimento del gasto en destino por la afectación que está teniendo en las actividades de empresas locales.
Plaça des Born
Desde esta patronal también se ha recogido la creciente preocupación de comercios y demás establecimientos de restauración del centro de Ciutadella, ante los primeros efectos negativos tras la supresión de aparcamientos y cierre al tráfico de la Plaça des Born y la eliminación de la parada de autobús en esta zona.
Aunque la medida se ha aplicado ya entrado el mes de julio, durante los primeros días ya se ha detectado un ambiente de inquietud entre los sectores afectados, que temen que se cumplan las previsiones y esta reordenación urbana agrave la tendencia a la baja en la actividad comercial del centro histórico. Las primeras quejas apuntan a una pérdida notable de clientela local y visitante en la zona, por las dificultades añadidas para acceder al corazón del núcleo urbano en plena temporada alta.